LOTO

Medidas: 7cm x 15,5cm x 11cm

"Loto"

Hace muchos, muchos años alguien a quién no recuerdo más que vagamente me contó una historia, decía algo así cómo…

"En África hay un árbol, al que llaman Azufaifo loto y que según los poetas y mitólogos quiénes prueban sus frutos olvidan sus casas, sus vidas, supongo que es a este árbol, al que hacía referencia Homero en la Odisea, cuándo hace que Ulises llegue a la isla de los hombres comedores de loto, a saber…"

Tenía entre las manos una cajita de madera que estaba decorando con una flor de loto, levantó un momento una ceja, me miró a los ojos y volvió a su trabajo a la vez que proseguía hablándome

"No pretendo que quién mire la decoración de esta cajita piense en embriagarse con su esencia mortal, y no consiga dejar de mirarla, porque si miras bien la decoración, verás que no son las delicadas hojas del loto lo único que hay pintadas, entre ellas verás algunos símbolos, está por ejemplo el archiconocido yin yan, la cruz de Isis, y otros símbolos protectores para diferentes culturas…"

De nuevo hizo una pausa para mirarme a los ojos antes de proseguir con sus palabras y su trabajo…

"La madre tierra, el padre sol, sin los que no seríamos nada, ni siquiera tendríamos un lugar en el que habitar y sentirnos en casa, en esta casa, y con este techo que los humanos llevamos tan adentro aunque a veces olvidemos que sin ellos nada seríamos… ¿Sabes? Hubo un tiempo en que los antiguos intentaron explicar el mundo que les rodeaba, para ello edificaron monolíticas construcciones, quedan algunas a la vista, cómo la de Stonehenge, otras las ocultó la cambiante geografía, quizá estén sepultadas en lo que fue el mar de Tethys, quizá en las tierras emergidas después de que el mediterráneo dejara de estar seco, no lo sé, cómo te digo, de eso hace demasiado años, de hecho millones de años, por lo que esta historia podría parecer una locura, y aún así, no lo es… supongo que con los años encontrar una muralla megalítica de más de 23.000 años de antigüedad dejará de ser noticia… el humano lleva más tiempo en la tierra de lo que se pretende explicar, porque quiénes tienen que explicarlo no saben hacerlo, bueno, me estoy enrollando… como te decía, hace muchos años, todos estos símbolos estaban unidos en el dintel de la misma puerta de entrada a una ciudad a la que los antiguos llamaron Atlántida, aunque realmente tiene otro nombre… podrás ver parte de sus caminos si navegas cerca de Cádiz, entre lo que hoy llaman Chiclana de la Frontera y Sancti Petri, cerca de dónde los antiguos, supongo que por transmisión oral supieron situar las columnas de Hércules, allí dónde África y Europa una vez estuvieron unidas, hasta que una noche, con gran estruendo para el mundo de entonces una parte de las montañas, de los valles que unían lo que hoy es el estrecho de Gibraltar se hundió dejando que el atlántico inundara la desértica cuenca del mediterráneo, esa noche la Tierra entera tembló, y no se sabe porqué los lotos de todo el mundo fueron consumidos con avidez por aquellos temerosos humanos, que imagino pensaron se acababa el mundo, lo único que ocurrió es que olvidaron, y luego no recordaron más, hasta que…"

Se detuvo de golpe, a esas alturas estaba barnizando la cajita, volvió a mirarme, por un momento, mientras le escuchaba conseguí imaginarlo todo, él sonrió…

"Mañana estará lista, vayamos a cenar ahora, es tarde para proseguir el camino"

Esa noche aprendí que no se debe suponer que alguien te seguirá contando algo, aquél tipo de mente inquieta y hábiles manos me despidió al día siguiente, recogió sus bártulos y se marchó por su camino, dos semanas después cuándo deshice mi mochila encontré en el fondo de ella la cajita amorosamente envuelta entre paños de lana para que no sufriera daños durante el camino, sonreí, la coloqué sobre la chimenea, y la dejé allí hasta hoy, que la he vuelto a tomar entre mis manos, no sé a tenor de qué impulso, supongo que para contarle a mi portátil aquella historia, ahora que empiezo a olvidar.